Lo hizo durante el acto de puesta en marcha de la nueva Dirección General de Derechos Humanos. A pesar de estar a cargo de un organismo autónomo e independiente del poder judicial y del poder ejecutivo, el presidente quiere sacar del cargo a la procuradora General de la Nación.

Alejandra Gils Carbó alertó sobre el intento de terminar con el trabajo de estos años desempeñado por el organismo. Lo hizo al poner en marcha la nueva Dirección General de Derechos Humanos. «En estos años de gestión hicimos lo que nunca se había hecho: generamos estructuras, articulaciones, capacitaciones, trabajo en equipo de fiscales, direcciones de apoyo técnico y preparando para el proceso acusatorio», expresó.

La procuradora es nombrada con acuerdo del Senado; en el caso de Gils Carbó, fue designada con con el voto de 60 de un total de 63 diputados.

Durante la gestión de Gils Carbó se crearon varias procuradurías especiales que se ocupan de distintos delitos federales. Por ejemplo la Procuraduría de Crímenes de Lesa Humanidad que impulsó 458 causas con 2 mil acusados y más de 500 condenados; la Procuraduría de Violencia Institucional que intervino en más de 500 casos de violencia y corrupción policial; la Procuraduría de Trata de Personas que permitió el rescate de centenares de víctimas de ese delito; la Procuraduría de Narcocriminalidad que impulsa investigaciones contra bandas de narcotraficantes y sus cómplices judiciales y policiales. Esta última intervino en causas en donde había altos jefes policiales como, por ejemplo, el ex jefe de policía de Santa Fe Hugo Tognoli.

También Gils Carbó puso en marcha las Agencias Territoriales de Acceso a la Justicia, creadas en barrios pobres de distintos puntos del país, para facilitar el acceso a la justicia a esos vecinos; y creó la nueva Unidad Fiscal Especializada en Violencia contra las Mujeres.

Crédito audio: Procuraduría General de La Nación

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