Las autoridades de la compañía entregaron a los familiares sus legajos restituidos, en los que figura que “la verdadera causa de baja fue la desaparición forzada o asesinato, como consecuencia del accionar del terrorismo de Estado”. Pablo Hodola se refirió a la recuperación de la carpeta de su padre.

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En el marco de este homenaje, se repararon y entregaron los legajos laborales de los 42 trabajadores detenidos, desaparecidos o asesinados entre 1974 y 1983. Ahora, en los archivos de la petrolera se leerá la verdadera condición de “detenido-desaparecido” de los trabajadores, muchos de los cuales figuraban como «cesanteado», «renunciante» o «fallecido».

Fue una iniciativa conjunta del Conicet, la Secretaría de Derechos Humanos, la Comisión de Trabajo por la Restitución de Nuestra Identidad y la propia YPF.

Durante el acto, los familiares fueron acompañados por la presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto; el ministro de Economía, Axel Kicillof; el secretario de Derechos Humanos, Martín Fresneda, y el presidente de YPF, Miguel Galuccio.

Pablo Hodola, hijo de Sirena Acuña y Oscar Luis Hodola, desaparecidos en 1977, contó cómo fue la recuperación de la documentación vinculada a su padre, que participó en la huelga del Chocón.

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