Paro docente a dos años de la explosión en la que murieron una docente y dos obreros
A dos años de la explosión en la escuela albergue 144 de Aguada San Roque, este jueves habrá marchas pidiendo justicia por los trabajadores y exigiendo edificios seguros para dictar las clases.
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Este jueves los docentes de Neuquén cumplen con una jornada de paro al cumplirse dos años de la explosión en la Escuela Albergue 144 del paraje Aguada San Roque en la que fallecieron la maestra Mónica Jara y los obreros Nicolás Francés y Mariano Spinedi.
Durante el día de hoy habrá marchas pidiendo justicia por los trabajadores y exigiendo edificios seguros para dictar las clases.
La Escuela 144 era la primaria albergue de Aguada San Roque. La mañana del 29 de junio del 2021 Mónica Jara se encontraba dentro de una de las aulas preparando sus clases. Nicolás Francés, gasista matriculado, en compañía de su sobrino y ayudante Mariano Spenedi, llegaron para realizar tareas de medición y control de algunos de los calefactores del establecimiento cuando, por algún defecto, uno de los calefactores explotó.
Al principio, las autoridades educativas de la provincia lo trataron como un accidente. Sin embargo, desde la Asociación de Trabajadores de la Educación de Neuquén (ATEN) denunciaron que no fue un accidente, que lo sucedido se podría haber evitado y pidieron que continúe la investigación sobre los responsables.
Marcelo Guagliardo, secretario de ATEN, contó en FM Pocahullo que la obra en la escuela “no estaba finalizada” al momento de la explosión.
“No se habían hecho los controles necesarios para certificar que las instalaciones estaban en perfecto funcionamiento, vinculadas precisamente con lo que tiene que ver con las pruebas de electricidad y demás. Eso no se hizo y se convocó a los docentes a retomar la actividad”, denunció el dirigente gremial.
“Se trataba de una obra nueva, no es que estamos hablando de una escuela que se vino abajo o que tenía problemas estructurales, era una obra que estaba para ser inaugurada y, a pesar de eso, por la desidia y negligencia tuvo esta tremenda, trágica e irreparable consecuencia de tres muertes evitables producto de estas condiciones en las que no se obró como debió haberse hecho de parte de los responsables de Obras Públicas”, concluyó.
