Otra comunidad indígena bajo amenaza de desalojo, esta vez de un organismo provincial
El Departamento Provincial del Agua quiere sacar a las familias originarias de la zona del Río Blanquito, en Tafí del Valle. No es un caso aislado. Días atrás, la comunidad Indio Colalao también denunció intentos de desalojo, amenazas e invasiones en sus territorios por privados.
Escuchar/Descargar el reporte de Agustín Mazuy desde FM Raco de Tucumán.
Familias de pueblos originarios que viven en la zona del Río Blanquito, en Tafí del Valle (oeste de Tucumán), vienen recibiendo órdenes de desalojo por parte del Departamento Provincial del Agua (DPA), que les da solo diez días para abandonar el lugar o serán expulsadas por la fuerza.
El organismo provincial justifica su accionar diciendo que se trata de una zona de riesgo y que las tierras pertenecen al Estado. Pero desde la comunidad denuncian el nivel de violencia con el que se manejan estas decisiones.
En declaraciones a FM Raco, Alejo Azar, cacique de Tafí del Valle y secretario general de la Unión Diaguita Tucumán, organización que nuclea a varias comunidades indígenas de la provincia, cuestionó la forma en que se intenta avanzar con los desalojos:
“La situación es terrible. Dos de las tres familias tienen hijos menores, personas con discapacidad. Las notificaciones fueron muy violentas. No se presentaron a hablar, simplemente dejaron un papel que intimaba a irse en diez días, usando palabras como ‘destruir’ cualquier construcción. Todo muy intimidante, poco democrático y poco legal. Se amparan en un decreto, pero en ningún momento se llamó a una mesa de diálogo. Claramente desconocen el territorio”.
Frente a esta situación, la comunidad presentó un recurso administrativo ante el DPA y un amparo ante el juez de paz local, con el objetivo de frenar el desalojo y exigir un espacio de diálogo para encontrar una salida justa.
Además, realizaron una radio abierta el sábado pasado, donde vecinos y vecinas se reunieron para visibilizar la problemática, rechazar los desalojos y exigir el respeto a la tierra y a su cultura.
Lo que sucede en Tafí del Valle no es un caso aislado. Días atrás, la comunidad Indio Colalao también denunció intentos de desalojo, amenazas e invasiones en sus territorios.
Todo esto ocurre en un contexto preocupante: en diciembre de 2024, el gobierno de Javier Milei derogó la Ley 26.160, una norma que frenaba los desalojos en tierras indígenas hasta que se completaran los relevamientos territoriales. Desde entonces, las comunidades originarias quedaron completamente desprotegidas frente al avance del Estado y de los intereses privados sobre sus territorios ancestrales.