Ley Bases: el saqueo de tierras fiscales fue puesto en evidencia en el debate en el Senado
En la reunión de comisión de ayer, el abogado Carlos Nielsen Enemark, invitado para explicar los alcances del proyecto enviado por el gobierno nacional, reconoció lo fácil que sería quedarse con tierras fiscales si este texto se convierte en ley.
Durante el debate en el plenario de comisiones de Legislación General, Presupuesto y Hacienda y Asuntos Constitucionales del Senado del proyecto de Ley Bases quedó confirmada la intención de entregar tierras fiscales a los grupos más poderosos y quitar derechos a los trabajadores.
En la reunión de comisión de ayer, el abogado Carlos Nielsen Enemark, invitado para explicar los alcances del proyecto enviado por el gobierno nacional, reconoció lo fácil que sería quedarse con tierras fiscales si este texto se convierte en ley.
La senadora de Unión por la Patria, Juliana Di Tullio, le planteó al letrado que si la Ley Bases es aprobada ella podría pedir permiso “para hacer un emprendimiento privado en tierras del ferrocarril Sarmiento, que tiene dominio de titularidad. Si no me contestan en 60 días, es mía, según este artículo”, agregó la legisladora bonaerense.
¿Saben qué es el silencio positivo para la ley? Que si un organismo no responde en 60 días, da por aceptado mi pedido. Así, cualquier privado podría quedarse con las tierras del Sarmiento… negocio inmobiliario ya te siento.#NoALaLeyBases pic.twitter.com/KkxUjLBnYx
— Juliana di Tullio (@ditulliojuli) May 13, 2024
“En los términos del artículo, sí”, interrumpió Nielsen Enemark. Pero Di Tullio continuó con su planteo: “Si yo pido, no me contestan, es mía. Según lo que dice este mismo artículo, el silencio es el sentido positivo. Pelito pa’ la vieja, esa tierra es mía. A mí me suena a un montón de negocio inmobiliario, pero póngale, doctor, que yo me quedo con esa parcela de la tierra que no me contestaron en 60 días porque pasó. Entonces, exijo la inscripción registral, la emisión de certificado y la autorización correspondiente en sede administrativa”.
“Está pensando correctamente”, asintió el abogado. “Es muy bueno, doctor. La verdad, excepcional”, cerró la legisladora.