La Corte dejó firme una condena contra Milagro Sala y convalidó la persecución política
La organización Tupac Amaru convocó para hoy a una conferencia de prensa para repudiar el fallo de la Corte y reclamar el indulto presidencial para Milagro Sala, presa política del gobernador Gerardo Morales desde 2016.
La Corte Suprema de la Nación dejó firme la condena a 13 años de prisión por la causa conocida como “Pibes Villeros”. La dirigente social jujeña fue condenada en 2019 por delitos como asociación ilícita, extorsión y defraudación al Estado, pero su defensa denunció en distintas instancias las irregularidades del juicio, como la falta de pericias y el rechazo del tribunal a aceptar testigos a su favor.
Los jueces del máximo tribunal Horacio Rosatti, Carlos Rosenkrantz, Ricardo Lorenzetti y Juan Carlos Maqueda se negaron a revisar la sentencia y simplemente convalidaron la condena impuesta por el tribunal oral que la juzgó.
La organización Tupac Amaru convocó para hoy a una conferencia de prensa para repudiar el fallo de la Corte y reclamar el indulto presidencial para Milagro Sala, presa política del gobernador Gerardo Morales desde 2016.
“En un fallo escandaloso, la Corte Suprema de Justicia de la Nación decidió convalidar la condena por razones políticas que Gerardo Morales y Carlos Pedro Blaquier ordenaron al Poder Judicial de la Provincia de Jujuy respecto de nuestra compañera Milagro Sala y de las compañeras y compañeros de la Tupac Amaru injustamente condenados”, empieza el comunicado de la organización.
Además, sostienen que “la decisión es un escándalo en términos políticos”, pero “también es un escándalo en términos jurídicos”.
“La actual decisión de la Corte Suprema de Justicia de la Nación pone en evidencia que la democracia en la Argentina se ha transformado en un decorado que simula institucionalidad para que los grupos económicos y sus representantes políticos, puedan asegurar la injsuticia social y la miseria planificada como destino inevitable de las mayorías populares. También, la condena ratificada por la Corte es una pistola en la cabeza de la militancia popular, de todo compatriota que decida abrazar la organización popular y la convicción política, para enfrentarse con la dinámica del sistema que pretende convalidar una realidad de mierda”, continúa el texto.
Ver comunicado completo.
ANTE LA INJUSTICIA DE LA CONDENA A MILAGRO SALA, CONVOCAMOS A CONFERENCIA DE PRENSA.
En un fallo escandaloso, la Corte Suprema de Justicia de la Nación decidió convalidar la condena por razones políticas que Gerardo Morales y Carlos Pedro Blaquier ordenaron al Poder Judicial de la Provincia de Jujuy respecto de nuestra compañera Milagro Sala y de las compañeras y compañeros de la Tupac Amaru injustamente condenados.
La decisión es un escándalo en términos políticos. Sepulta los antecedentes de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, de la Corte Interamericana de DDHH y del comité contra la tortura de la ONU. Desconoce el carácter político de la persecusión, la condena y la prisión que purga Milagro Sala y que purgaran decenas de Tupaqueros y Tupaqueras en Jujuy.
Pero también la decisión es un escándalo en términos jurídicos. Retrocede 30 años en la doctrina de la propia Corte Suprema, asignandole un margen de arbitrariedad a las jurisdicciones provinciales que le permite a cualquier Tribunal Superior enterrar las garantías procesales de la provincia por el simple hecho de su existencia.
La cárcel que sigue padeciendo Milagro Sala y la actual decisión de la Corte Suprema de Justicia de la Nación pone en evidencia que la democracia en la Argentina se ha transformado en un decorado que simula institucionalidad para que los grupos económicos y sus representantes políticos, puedan asegurar la injsuticia social y la miseria planificada como destino inevitable de las mayorías populares.
También, la condena ratificada por la Corte es una pistola en la cabeza de la militancia popular, de todo compatriota que decida abrazar la organización popular y la convicción política, para enfrentarse con la dinámica del sistema que pretende convalidar una realidad de mierda.
Y es también, una mancha imborrable en el proyecto político que llegó al gobierno con Milagro Sala presa, con discursos que hablaban de su necesaria libertad, y después de tres años de gobierno, apenas llenó de gestualidades la dinámica inexorable de la persecusión política que sigue sufriendo la flaca.
Un fallo vergonzoso, un silencio sorprendente en algunos, una complicidad evidente en otros tantos y una cobardía que se hace insoportable
¡INDULTEN YA A MILAGRO SALA!
