El gobierno reprimió la marcha de los jubilados y un fotógrafo está en grave estado
Entre las víctimas de la brutal acción policial se encuentra el fotógrafo Pablo Grillo, de 35 años, quien fue gravemente herido por una granada de gases que impactó en su cabeza mientras cubría la movilización. Foto: Gabriela Manzo.
El gobierno de Javier Milei respondió con una violenta represión a la marcha de jubilados que reclamaban un aumento de emergencia, una protesta que contó con el respaldo de miles de hinchas de clubes de fútbol. Entre las víctimas de la brutal acción policial se encuentra el fotógrafo Pablo Grillo, de 35 años, quien fue gravemente herido por una granada de gases que impactó en su cabeza mientras cubría la movilización.
Antes de las 17, horario de la convocatoria, fuerzas federales desplegadas en la zona del Congreso Nacional comenzaron a reprimir con gases lacrimógenos, balas de goma y carros hidrantes contra los manifestantes que se concentraban de manera pacífica. El operativo dejó más de 100 personas detenidas y al menos 20 heridos.
Fabián Grillo, padre del fotógrafo herido, se manifestó con dureza contra las autoridades y responsabilizó directamente a la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, y al presidente Milei por la agresión sufrida por su hijo: “Somos una familia de militantes y lo decimos con orgullo. La militancia no es mala, pese a lo que diga la ministra. Mi hijo es militante, pero también es fotógrafo y estaba trabajando, documentando lo que ocurría. Por culpa de una ministra irresponsable y de un presidente que habla con su perro muerto, mi hijo está corriendo peligro. Ahora lo están operando y su situación es muy grave”.
La ministra de Seguridad había declarado ante los medios de comunicación aliados al gobierno que Grillo era “un militante kirchnerista que hoy trabaja en la municipalidad de Lanús con Julián Álvarez”.
#AHORA El fotógrafo Pablo Grillo es uno de los heridos en la feroz represión a cargo del gobierno durante la manifestación de hoy en Congreso y Plaza de Mayo.
— LA TRIBU (@fmlatribu) March 12, 2025
La policía le disparó en la cabeza con un tubo de gas lacrimogeno y se encuentran internado en el hospital Ramos Mejía. pic.twitter.com/k5eyprc3AO
Las detenciones se llevaron a cabo de manera arbitraria, y durante varias horas se ocultó información sobre la situación de los manifestantes apresados. Así lo denunció Alejandra Barry, integrante del Centro de Profesionales por los Derechos Humanos. “Estamos en el centro de monitoreo tras la brutal represión. Hay decenas de detenidos, pero no nos brindan información sobre sus nombres, el número exacto de personas ni el lugar donde serán trasladados. Sabemos que hay manifestantes hospitalizados con heridas graves y exigimos conocer la situación de los detenidos. Esto es gravísimo. Hacemos responsables tanto a la ministra de Seguridad Patricia Bullrich como al Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires por esta represión y por las detenciones arbitrarias e ilegales”.
Por la noche, hubo cacerolazos en distintos puntos de la Ciudad de Buenos Aires y una manifestación en Plaza de Mayo en repudio a la violencia estatal. Cerca de la medianoche, la jueza Karina Andrada ordenó la liberación de todas las personas detenidas, argumentando que “se encuentra en juego un derecho constitucional fundamental, como es el derecho a la protesta, a manifestarse en democracia y a la libertad de expresión”.