Artistas de la provincia se organizan para rechazar el cierre del Instituto Nacional del Teatro
Franco Morán, delegado del Instituto Nacional del Teatro representación Córdoba, dijo en Una radio, muchas voces que están convocando a trabajar rápidamente “con la sociedad argentina y con los legisladores miembros del Congreso para solicitar la no aprobación de la ley ómnibus”.
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Artistas trabajadores de la cultura de Córdoba se organizan para implementar un plan de lucha en contra del proyecto de Ley Ómnibus que envió el presidente Javier Milei al Congreso con el que pretende, entre otras modificaciones y derogaciones, cerrar el Instituto Nacional del Teatro y otras organizaciones que fomentan y promueven la actividad y el trabajo en el ámbito cultural.
Por eso comenzaron los preparativos de asambleas, reuniones y plenarios para formar un movimiento de unidad que rechace las propuestas del gobierno de La Libertad Avanza.
Franco Morán, delegado del Instituto Nacional del Teatro representación Córdoba, dijo en Una radio, muchas voces que están convocando a trabajar rápidamente “con la sociedad argentina y con los legisladores miembros del Congreso para solicitar la no aprobación de la ley ómnibus”.
El trabajador explicó que uno de los artículos del proyecto “quiere derogar un instituto que ya tiene 25 años y ha hecho que Argentina se destaque por su desarrollo de la actividad teatral a lo largo y ancho del país, de manera absolutamente arbitraria, inconsulta, sin que nadie lo demande”.
Morán señaló que es una decisión que pone en juego el sostenimiento de más de 350 salas del país y la actividad teatral para miles de artistas de todo el país.
Además de considerarla una medida inconsulta y arbitraria, el delegado teatral analizó que se trata de una iniciativa que cuesta identificar qué sector se vería beneficiado porque el teatro independiente “no tiene sectores de la economía concentrados interesados”.
“Pensamos que es un ataque a todo el proceso de producción artística que genera el teatro independiente, que es crítico, contestatario y se preocupa por los problemas y necesidades de su sociedad, que hace memoria. Nos da la sensación de que hay una intención política ideológica de deteriorar este sector”, finalizó.