Bondades y riesgos de la explotación del litio, un debate de ida y vuelta
La problemática quedó en el centro de la escena del segundo episodio del programa “De Ida y Vuelta, debates del campo popular”, una producción del Foro Argentino de Radios Comunitarias (FARCO)
La palabra parecía desconocida hasta hace unos años, pero se instaló repentinamente y con potencia: el litio, ese mineral ahora apodado como “el oro blanco” es parte de las conversaciones cotidianas de pueblos y comunidades. Es un recurso que, según el cristal con que se mire, está rodeado de bondades o de riesgos.
La problemática quedó en el centro de la escena del segundo episodio del programa “De Ida y Vuelta, debates del campo popular”, una producción del Foro Argentino de Radios Comunitarias (FARCO): la discusión entre una ambientalista riojana y un funcionario formoseño permite ver diferentes costados del asunto, tal como se presenta en las entrevistas aparte. También hizo un aporte Pato Agosto, de FM Horizonte 102.7, de Medanitos, Catamarca.
El programa completo puede escucharse acá
Jeny Luján, integrante de la Asamblea Ciudadanos por la Vida en la provincia de La Rioja, cree que “la extracción del litio sacrifica territorios y no va a ser solución”. Afirma: “Hay una necesidad económica del Estado nacional y las provincias para pagar una deuda externa ilegítima, ilegal, impagable, que no es de los pueblos. Eso obliga a exportar. El litio no resuelve ningún problema de deuda interna, ni de deuda con comunidades y pueblos. Por eso hay un gran impulso de Nación y de los gobernadores obedientes para sacrificar territorios”. Y agregó: “Somos el patio trasero de los países ricos que tienen su estándar de vida a costillas de esta neocolonización”.
En cambio Darío Vergara, director de Industria, Hidrocarburos y Minería de Formosa asevera que “el litio presenta grandes virtudes y se puede producir en armonía” con las comunidades y la naturaleza. En su provincia la escala de producción y explotación no es tan grande como en Jujuy o Salta, pero sí incipiente. “El litio viene a potenciar el negocio de los hidrocarburos. Presenta grandes virtudes técnicas, genera importantes fuentes laborales y se puede producir en armonía con las comunidades de la zona”, completa.
El litio es un mineral que se puede extraer de rocas o salares de altura, como los que se encuentran en la Puna argentina en concentraciones bastante abundantes. En los últimos años se ha observado un aumento en la demanda como un insumo clave para la fabricación de las baterías que se utilizan en vehículos eléctricos y para almacenar energía renovable.
Según los últimos datos disponibles del Servicio Geológico de los Estados Unidos, el 46% de las reservas mundiales de litio se concentra en el llamado “triángulo del litio” conformado por Argentina, Bolivia y Chile.
Hay en el país 38 proyectos mineros que tienen al litio como mineral principal. De este total, la mayoría están en exploración avanzada y sólo 2 se encuentran en producción.
“Sacrifica territorios”
Entrevistada en el espacio de FARCO “De Ida y Vuelta, debates del campo popular”, Luján explica: “aunque el litio se presenta como alternativa para evitar los combustibles fósiles, no es para nosotros una posibilidad de mejorar o incidir en la crisis climática. Sacrifica territorios como cualquier otra minería. No va a ser la solución que se difunde al cambio de la matriz energética. El impacto de la extracción y de la transformación tiene un impacto ambiental muy alto y lo vamos a pagar las comunidades cercanas a los yacimientos”.
“Está demostrado que este tipo de minería seca las lagunas que son humedales, un ecosistema muy sensible a cualquier cambio, y tienen una gran función y servicios sumamente importantes en el ambiente, como la regulación del clima de alta montaña”, argumenta la dirigente.
Luján advierte que también es importante considerar el impacto social: “en un pueblo cercano a Chilecito, Fiambalá, están alertando sobre la contaminación social, es terriblemente preocupante. La minera china ha pasado a ocupar el lugar del Estado y tiene consecuencias gravísimas: es la que resuelve la salud, está presente en las necesidades de las escuelas, la que financia los clubes, sponsoriza a todos los deportistas y está presente en las ferias de artesanos. Hay una serie de cuestiones que interfieren, rompen el tejido social y las cuestiones culturales”.
“Grandes virtudes”
Vergara, funcionario formoseño del sector minero y energético, tiene otra posición: “El litio es el mineral por el cual el mundo protagoniza la transición energética, desde las energías convencionales de recursos fósiles a las renovables. Es un desafío que se ha acelerado. El litio presenta grandes virtudes”.
Afirma que el Estado de su provincia interviene activamente en diversas facetas: “somos autoridad de aplicación y representamos al gobierno en el control y fiscalización de las operaciones de las empresas y tenemos operadoras a las que se da en concesión la explotación del recurso”.
Insiste: “Somos conscientes de que la industria minera la conforman las empresas, los Estados, las comunidades y pueblos aledaños. El litio es un recurso estratégico y hay que tener en cuenta a todos esos actores y los involucrados se deben ver afectados en forma positiva. Desde el punto de vista del desarrollo, el ambientalismo es un involucrado más del proyecto. No hay impedimentos ni inconvenientes. Hay una armonía con las producciones alternativas de la zona”.
-¿Cómo se puede hacer para que estas tremendas riquezas que va a generar el litio no se las queden cinco vivos?
-Hay que debatir hacia dónde ir y profundizar el cambio. Las provincias juegan un rol fundamental para que los beneficios y la producción industrial se integren a la comunidad y al Estado nacional. Estamos cumpliendo con los pasos que se deben cumplir
-¿Cuál es la expectativa respecto de la creación de empleos, en una industria señalada como que no es una de las que más mano de obra genere?
-En el caso de Formosa, la zona emplea a unas 120 personas en hidrocarburos y litio, hay 7 operarios calificados que se capacitan en la instalación de la planta piloto, son personas de la comunidad aborigen de la zona. Es muy importante para la generación de empleo.