Martes 01 de Febrero del 2022 - Nacionales

Andrés Asiaín: “El acuerdo no va a permitir la estabilidad económica porque nos mantiene al borde del default”

En declaraciones al Informativo FARCO, el economista y director del Centro de Estudios Económicos y Sociales Scalabrini Ortíz opinó que el nuevo arreglo entre Argentina y el FMI “no es conveniente porque los mercados 'van a saber' que Argentina puede caer en default cada tres meses si no le aprueban las metas” de las revisiones que realizará el organismo multilateral, una de las condiciones de la negociación.

El economista y director del Centro de Estudios Económicos y Sociales Scalabrini Ortiz (CESO), Andrés Asiaín, opinó que el acuerdo entre Argentina y el Fondo Monetario Internacional (FMI)no va a permitir la estabilidad económica porque va a mantener a Argentina al borde del default durante los dos años que restan del gobierno de Frente de Todos”.

En declaraciones al Informativo FARCO, aseguró que el nuevo arreglo al que llegó el gobierno de Alberto Fernández “no es conveniente porque los mercados ‘van a saber’ que Argentina puede caer en default cada tres meses si no le aprueban las metas” de las revisiones que realizará el organismo multilateral, una de las condiciones de la negociación.

Por el otro lado, le restringe la autonomía en la decisión de política económica siendo que tiene que consolidar la recuperación económica y tratar de ganar las próximas elecciones”, indicó.

El viernes, una vez finalizado el anuncio del Presidente, el ministro de Economía, Martín Guzmán explicó que el nuevo arreglo con el organismo multilateral tiene una duración de dos años y medio y “es un financiamiento en un monto equivalente a lo que fue el programa stand by acordado en el gobierno anterior, es decir de alrededor de 44.000 millones de dólares”.

La negociación incluyó temas como la inflación, emisión monetaria, metas fiscales y política cambiaria, y la reducción del déficit fiscal, es decir achicar la diferencia entre la recaudación y el gasto del Estado. El ministro admitió que el tema de la política fiscal fue uno de los más importantes y el último que se trató en el nuevo acuerdo. “Para el 2022 se espera un déficit fiscal del 2,5% del Producto Interno Bruto. Para el 2023 esa variable será del 1,9% y para el 2024, el 0,9%”, detallaba Guzmán.

Mientras tanto, la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner no hizo pública su posición al respecto y desde Juntos por el Cambio dijeron que el acuerdo era “positivo” aunque no aseguraron apoyarlo en el Congreso. Para concretar el nuevo pacto con el FMI, y de esa manera llegue el primer desembolso del Programa, el proyecto debe ser aprobado por los legisladoras y legisladoras de ambas Cámaras.

Durante el fin de semana el sector sindical también se pronunció sobre el acuerdo. La Confederación General del Trabajo (CGT) respaldó la decisión del gobierno nacional, que “mantuvo con firmeza el compromiso de defender las políticas sociales, laborales y de seguridad social de nuestro país, y por ello expresamos nuestro apoyo al acuerdo”.

“Esperamos que la certidumbre macroeconómica que se desprende del acuerdo alcanzado movilice las inversiones necesarias para potenciar el crecimiento económico y permitan reducir los niveles de pobreza y desigualdad que hoy resultan intolerables. El peronismo vuelve a demostrar que es posible superar las peores crisis sin resignar derechos sociales, sin ajuste ni devaluaciones, defendiendo el interés naciona, pero sobre todo cobijando a los que menos tienen”, continúa el comunicado firmado por los secretarios generales Héctor Daer, Pablo Moyano, Carlos Acuña y Jorge Sola.

La CTA Autónoma rechazó “el camino de acuerdo con el FMI anunciado por el gobierno nacional” y pidió que se investigue “la forma irregular en la que este préstamo (el más abultado en la historia del FMI) fue otorgado”.

“Los programas del FMI no tienen por objetivo recuperar condiciones virtuosas de desarrollo económico, sino que se generen excedentes para pagar esa deuda por lo que queda en claro que el Estado deberá impulsar un ajuste importante, ceder soberanía en materia en políticas fiscales monetarias y financieras”, comienza el texto de la central trabajadora.

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