La integrante del Centro de Estudios e Investigaciones Laborales de CONICET, Nuria Giniger, explicó el riesgo que implica que se deje de hacer investigación en base a las necesidades de la mayoría de la población.

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El gobierno pretende recortar cerca de un 30% los recursos destinados a esta área, poniendo en riesgo los avances de los últimos años. “Aprobar este presupuesto sería un golpe mortal para todo el sistema científico”, sentenció la investigadora Guadalupe Suárez.

En declaraciones a Informativo FARCO la integrante del Centro de Estudios e Investigaciones Laborales de CONICET, Nuria Giniger, explicó el riesgo que implica que se deje de hacer investigación en base a las necesidades de la mayoría de la población.

«Está planteado desde el Ministerio y desde el gobierno nacional que las partidas que el Estado no daría al desarrollo de ciencia y tecnología deberían venir de organismos internacionales o empresas multinacionales. Esto es muy problemático porque las agendas de investigación -con el financiamiento estatal- son agenda relativamente autónomas: hay problemas que venimos desarrollando que tienen que ver con problemas de la región vinculados a la salud, las vacunas, educación, trabajo. Si las agendas de investigación las determinan los grandes laboratorios o los organismos de créditos internacionales, nuestras agendas particulares y propias de una región postergada quedarían claramente relegadas», afirmó.

En relación a la posibilidad de que el gobierno recomponga algunas partidas que pensaba recortar, la doctora Nuria Giniger aseguró que desde el Colectivo de Científicos y Universitarios Autoconvocados que integra no tienen ninguna certeza a pesar de lo que han publicado algunos medios de grandes empresas.

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