Alimentación, encuentro y solidaridad: Cocina Comunitaria "Nuevo Amanecer"
"Acá no hacemos caridad, acá hacemos solidaridad, que es la fuerza que nos une", cuenta una de las impulsoras de esta organización barrial, Fátima Domínguez. Una historia de lucha, empoderamiento, construcción colectiva y garantía de derechos.
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A través de la voz de sus protagonistas, los integrantes de Cocina Comunitaria «Nuevo Amanecer» rememoran que la primera comida que prepararon fue un guiso, abajo de un árbol de moras, cocinado por ocho mujeres de la comunidad.
La cocina es un espacio de encuentro. Un lugar en el cual el grupo de madres se organiza para sostener un comedor que permita a las numerosas familias de Barrio ATE encontrarse. Para reconocerse como vecinos, compañeros y amigos. Para juntos vivir y sobrevivir. Para establecer lazos que los unan y cambiar los flagelos por nuevos amaneceres. «La cocina hoy está trabajando no tan solo con dar el platito de comida, sino también involucrándose en otros problemas de nuestra comunidad; como lo que es drogadicción, violencia, etc.», explica Fátima Domínguez,una de sus impulsoras.
Una historia de lucha, empoderamiento, construcción colectiva y garantía de derechos.
