Lunes 15 de Abril del 2019 - Mendoza

Mendoza: Familias campesinas alertan el remate de sus tierras

Hoy serán atendidas por la Suprema Corte de Justicia de la Provincia de Mendoza en busca de una vía legal que les permita seguir viviendo y produciendo allí.

Escuchar/Descargar el reporte de Radio La Mosquitera, desde Mendoza

La Dirección de Activos de ex Bancos Oficiales (DAABO), dependiente del gobierno de Mendoza, determinó la subasta de una finca en la que hace treinta años familias campesinas viven y producen en la localidad de Tunuyán. Según denuncian las familias, esto contraviene varias normas y tratados internacionales, además de beneficiar de antemano a uno de los posibles compradores.

«Hoy  familias campesinas de Tunuyán se presentarán a una audiencia en la Suprema Corte de Justicia en el marco de la lucha que vienen llevando por la tierra donde hace casi 30 años viven y trabajan (…) Estas familias campesinas vienen recorriendo un largo camino en la justicia, siempre estando abiertas a todo tipo de diálogo, habiendo asistido a todas las instancias a las que las han convocado. Esperan que finalmente se resuelva su situación y la de todas las personas que luchan por su tierra,  reconocidas por la ONU en su Declaración de Derechos de los campesinos y campesinas aprobada por la Asamblea General en diciembre pasado» informaron en un comunicado.

Emilia José, habitante de la finca y militante de la Unión de Trabajadores Rurales Sin Tierra (UST), explicó: «el año pasado nos enteramos, a través del diario Los Andes, que se habían puesto en licitaciones unas tierras, de las cuales una de esas era nuestra».

«Después de muchos años que vivimos acá, darse cuenta que quieren rematarte las tierras donde vivís, es doloroso pero así y todo empezamos a tratar de frenar la licitación. Primero intentando juntar el dinero necesario para poder presentarnos como oferentes, claramente las familias campesinas que vivimos de la tierra no estamos al alcance de competir con los otros oferentes» expresó.

No solamente se está intentando vender un terreno con la gente adentro, sino que además es un terreno que tiene infraestructura y que produce comida. «Aproximadamente hace 30 años que estamos viviendo aquí, que producimos la tierra diferentes generaciones de familias, que es nuestra principal fuente de ingreso, y además cuando supimos esta situación empezamos a reunir todo lo que nos podía llegar a probar que somos poseedores de esta tierra» contó la productora.

 

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