El 3 de junio se realizó la marcha del Ni una menos en todo el país, con reclamos particulares en cada localidad. Cobertura de las radios comunitarias.

El sábado 3 de junio se realizó en todo el país la tercer marcha con la consigna “Ni una menos, vivas nos queremos”. El movimiento de mujeres repudió los femicidios y travesticidios, y la criminalización y represión que sufrieron las mujeres en los encuentros nacionales en Mar del Plata y Rosario y el 8 de marzo de este año luego de la movilización por el Día Internacional de la Mujer, en la ciudad de Buenos Aires.

Este año, se sumó el pedido de libertad para Eva Analía «Higui» De Jesús, detenida por defenderse de una violación, de la dirigente social Milagro Sala, detenida hace más de un año, y de las presas políticas de la Tupac Amaru.

Sin embargo, cada localidad tuvo reclamos particulares y se resaltaron casos e historias de violencias hacia las mujeres ocurridos en esos territorios.

Córdoba

Las vecinas y vecinos del barrio cordobés Villa El Libertador decidieron decir Ni Una Menos en el barrio ubicado a 8 kilómetros de la capital cordobesa, donde se realizaba la marcha principal. Desde Allí, Micaela Cano, vecina del barrio, contó a FM Sur que “creemos que es muy importante la problemática de la violencia de género, pero también es importante cómo visibilizamos los barrios populares, que también están atravesados por la violencia. Por eso tomamos esta iniciativa de movilizarnos dentro de los sectores populares, creemos que desde los barrios también podemos realizar estas acciones para empezar a tomar las riendas de los problemas que tenemos como sociedad.”

Marihem Soria, tallerista de murga del Centro Cultural de Villa El Libertador contó que “decidimos quedarnos trabajando desde los talleres de prevención en el centro cultural del barrio para reflexionar sobre la realidad cotidiana de las mujeres en el barrio. Decimos desde nuestro barrio ni una menos, libres nos queremos, una sociedad igualitaria entre hombres y mujeres donde podamos vivir con dignidad. Sumamos a esta causa desde nuestro lugar en el mundo que es Villa El Libertador.»

Claudia Casas, de la organización de Mujeres en Marcha, se refirió al femicidio Ana Rosa Barrera en el sur de la ciudad de Córdoba, conocido pocas horas antes de la marcha: “Lamentablemente tenemos que decir una más, venimos denunciando la violencia en Córdoba pero principalmente en la zona, donde hubo cuatro víctimas en los últimos cinco años. Responsabilizamos al Estado por esta situación, porque cuando vamos a los estamentos públicos a buscar respuestas para las mujeres que son víctimas de violencia, no están las herramientas para trabajar como corresponde y para que las mujeres tengan una rápida respuesta desde el estado y desde la justicia”.

Desde el acto en la ciudad de Córdoba, Anahí Rodríguez, integrante de la organización Sí Mujer, de Jesús María, dijo que las mujeres después de lograr salir del ámbito de violencia física y psicológica, están sometidas a sufrir la violencia institucional. “El Estado tiene que capacitar a las personas que trabajan en las comisarías o en tribunales para que estén preparadas para tratar a las mujeres víctimas de violencia, sino seguimos siendo violentadas por un sistema que no está preparado”, reflexionó.

Santiago del Estero

Desde la marcha en Santiago del Estero, Marianela Lezama, de Mujeres de la Matria Latinoaméricana (Mumala) manifestó que “dos años después del primer ni una menos, seguimos exigiendo lo mismo que en el 2015, que cese la violencia contra las mujeres.  Estamos en la calle nuevamente porque sigue creciendo la lista de los femicidios, es necesario que quiénes hoy nos gobiernan se hagan cargo de esta situación e intervengan para que dejen de morirse las mujeres sólo por hecho de ser mujeres”.

Marianela también se refirió a la creación del Juzgado de Género en la provincia: “Es el primero en el país, creemos que esta política del gobierno provincial ha sido un avance, sin embargo cuando vamos a golpear las puertas está vacío, las mujeres siguen siendo revictimizadas, y se nombró como subdirector a un abogado que tiene causas por violencia de género. Necesitamos que esto no se quede sólo en las instituciones, sino que se llene de personas que estén sensibilizadas y capacitadas para poder abordar esta problemática”.

Paraná, Entre Ríos

Soledad, integrante de la organización Sexualidades Disidentes y de la Asamblea por la Libertad para Higui contó que “reclamamos al municipio de Paraná por la ley de emergencia municipal, que esta aprobada pero no tiene presupuesto destinado, por lo tanto es una política que no existe. También le pedimos a la provincia políticas públicas reales para prevenir y erradicar la violencia de género. Exigimos justicia, no queremos mas mujeres, lesbianas ni travestis asesinadas por este machismo, por este patriarcado y por este Estado”.

Tupungato, Mendoza

Paula y Susana, contaron que en la localidad de Tupungato (Mendoza), se siente la discriminación y el maltrato por ser mujer en el ámbito laboral. También expresaron la importancia de acompañar estas marchas: “No tenemos que esperar a ser una víctima mas, sino que tenemos que acompañarnos unas a otras, eso es la sororidad”.

Por último agregaron la necesidad de criar a los niñxs sin machismo y con igualdad dentro de la propia casa.

Belén contó que marchó por las calles de Tupungato por “los casos interminables de violencia de género, que no es sólo física”, explicó y dijo que también concurrió “por mis amigas que no vienen a marchar porque no pueden o porque no saben que están viviendo situaciones de violencia”.

En Mendoza, hicieron responsable al Estado por los 22 femicidios ocurridos en el año 2016 y también reclamaron por un Estado provincial presente, que tome las medidas necesarias para prevenir y erradicar la violencia hacia las mujeres.

Junín, Buenos Aires

Desde la movilización en Junín, Olga Prieto, concejal del Frente para la Victoria, pidió la libertad de la dirigente social Milagro Sala y las presas políticas de la Tupac Amaru, en su mayoría mujeres, y recordó que distintos organismos de derechos humanos del país e internacionales se han pronunciado en contra de esta detención ilegal y arbitraria.

Juliana Miranda, integrante de Manada Feminista, contó que en la ciudad la marcha se construyó a través de una asamblea de mujeres,y que al igual que a nivel nacional los reclamos están dirigidos al Estado.

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